Por Marcos Brito, director ejecutivo del Instituto de la Construcción Que el Ministerio de Vivienda y Urbanismo haya destinado más de 1.100 millones de pesos para fortalecer la plataforma DOM en…
Por Marcos Brito, director ejecutivo del Instituto de la Construcción
Que el Ministerio de Vivienda y Urbanismo haya destinado más de 1.100 millones de pesos para fortalecer la plataforma DOM en Línea no es solo una buena noticia para el sector construcción: es una señal concreta de compromiso con la modernización del Estado y la eficiencia urbana.
Esta inversión, que triplica los recursos que el Minvu había destinado anteriormente al proyecto, permitirá optimizar la plataforma, junto con asegurar su sostenibilidad en el tiempo. Hoy, con 113 municipios adheridos —lo que equivale a un 34% del total nacional— y un plan piloto de apoyo en marcha para otras 20 comunas, la plataforma avanza desde la fase experimental hacia su consolidación como política pública.
Desde el Instituto de la Construcción, nos sentimos parte de esta evolución. No solo porque fuimos la institución que desarrolló el diseño conceptual del proyecto en sus inicios, sino porque hemos sido, y seguiremos siendo, impulsores activos de la Mesa Técnica Público-Privada que lo respalda, hoy compuesta por el Minvu, la Cámara Chilena de la Construcción, el IC, Construye2025, la ADOM, la ADI, el Colegio de Arquitectos y la Secretaría de Modernización del Estado, entre otras entidades clave. Retomar esta mesa en abril fue clave para alinear esfuerzos, compartir aprendizajes y, sobre todo, construir una visión compartida para una plataforma que debe ser eficiente, segura, y sobre todo, justa.
La inversión anunciada por el Minvu también contempla recursos para transferencias a municipios, fortalecimiento de los equipos técnicos y licitaciones tecnológicas. Esto nos permitirá avanzar hacia un sistema más transparente, trazable y estandarizado, que facilite los trámites y también eleve los estándares del sector.
Esta es una oportunidad histórica: no solo para agilizar permisos y reducir la tramitología, sino para construir un sistema que dé garantías a todos los actores y que no dependa del tamaño o los recursos de cada comuna, con lo que se busca una mejor equidad territorial. Porque en una ciudad moderna, el acceso a permisos y servicios debe ser un derecho, no un privilegio.
En la mesa técnica que hemos retomado, hemos planteado con claridad que la solución a los cuellos de botella en la tramitología pasa por integrar mejor la información, simplificar procesos y asegurar la interoperabilidad de los sistemas. La digitalización debe ser, además, una vía para asegurar el cumplimiento normativo y mejorar la calidad de nuestros entornos construidos.
Como Instituto, reafirmamos nuestro compromiso con este proceso. Estamos convencidos de que la articulación público-privada y el diseño técnico riguroso pueden generar verdaderos cambios. Y en DOM en Línea, vemos no solo una plataforma digital, sino un proyecto-país que, con inversión y visión, está comenzando a dar sus frutos.